jueves, 19 de abril de 2012

Es solo nuestro



El Extraordinario concierto de los trabajadores del día 22 de Abril
La ciudadanía, mediante las administraciones, paga. 
Las trabajadoras/es con el préstamo de nuestros salarios y trabajo, pagamos.
Es evidente que ninguna razón lógica justifica que quienes son responsables de la situación en que nos encontramos, no paguen también.
El domingo 22 todos los trabajadores/as tenemos el deber de venir al Liceu a exigirles que paguen los platos rotos
Que dimitan. Que negocien. Que nos dejen defender y salvar el Liceo
    Terminamos la temporada pasada, pactando un septiembre de cierre, el primer titulo en versión concierto y malas vibraciones y augurios por doquier.

    Pretendieron ya en esa primavera impresionarnos con un documento, Nuevos Horizontes (no había alternativa posible y de lo contrario toda la culpa para los irresponsables y nada dialogantes trabajadores) como única solución a los recortes.
    El innombrable Dir. Gen. Que en su momento, 2008, decía que al Liceu no llegaba la crisis, pretendía dárselas de magnifico gestor y este otoño alardeaba de tener solucionado con el cierre del Teatro en septiembre el 60% del déficit de ingresos que se generaron por los recortes de las administraciones (luego vino la ultima puntilla de Mascarell). Ya sobreentendimos por enésima vez, que lo que no se alcanzase, ese otro 40%, nuevamente, seria achacado a los trabajadores (los inflexibles, que no admitíamos hacer ordinario el esfuerzo y flexibilidad pactado el verano anterior). Objetivamente a nuestro Convenio Colectivo, el marco laboral.
    Mientras nos vacilaba, con estos alardes otoñales, nuestro De Guindos particular ja tenia más que planeado el bombazo que pretendía lanzar desde el diario El Mundo para la siguiente estación. Ese invernal 13 de enero, nos dejo helados. 
 
    Este señor, es político, amigo de los políticos, servidor de la política y sabedor de los cocidos políticos. No es creíble; que no hiciese, como sí hicieron otros, al parecer más sensatos (seguro que no mejor informados) y previese la crisis, los recortes y las medidas a tomar o adoptables.
    Lo que sin duda sabemos, es que vino con proyectos y objetivos fijos(como aquellos que cubrían la Sr. Cullell y sus directivos, para incrementarse un 15% sus emolumentos, que desaprobados por alguien de la directiva le supuso su cese, por exceso de celo; reajustar sí, pero no hacer el primo, tampoco fue tan grave lo de Caminal..). Así se subió en dos ocasiones, desde aquel estío de 2008, sus honorarios. Política de continuidad que tanto les gusta a los técnocratas -chupoptero-gestores.
    Alguien lo admitió, lo aprobó y ningún representante de los trabajadores estuvo presente para tomar nota, es lamentable y debemos poner remedio a estos avatares en el futuro.
 
    Sus fijaciones han sido claras y evidentes: Vivir bien, eso por descontado, a los viajes, vuelos y visas nos remitimos ¿cuando nos permitirán demostrarlo?
    Solo ha comparecido ante los delegados y el Comité, cuando ha sido imprescindible o ineludible y siempre para delegar de forma reincidente e indecente en Tarragó (su ejecutor desde RRHH). Ha dejado de forma sistemática el trabajo sucio a los sicarios (famosa tradición a la colombiana), mareando y entretenido con engaños y malas artes.
    Mintiendo. En otoño ya vendían entradas para un evento, (13 Abril, concierto de Silvia Pérez Cruz), que coincidía en día y hora con una opera que estaría afectada por el ERE. Mintieron cuando dijeron que era un error (momentáneamente se dejaron de vender en servicaixa, pero el club de lectores de la vanguardia las continuo ofreciendo). Y callaron vergonzosamente, cuando se les volvió a preguntar recientemente.
    Ya sabían, que tendrían recorte de la conselleria, nueva excusa. La ocasión la pintan calva: ERE temporal en primavera y como anunciaba en el diario madrileño; ERE de extinción en septiembre próximo. Con el argumento del primero te encasqueto el segundo y aquí paz y después gloria. 
 
   Llego con la misión (quizás, encontró la hoja de ruta en la caja fuerte entre telarañas y polvo) de aniquilar el marco laboral. Desmenuzar el convenio colectivo. Tenia que mejorar orquesta y coro, flexibilizar y reducir escenario y fustigar la administración (por simple poderío, pues en los niveles superiores el nepotismo y favoritismos de pro están a la orden del día)

    No podía ser de otra manera, el dialogo, ya desde la primera intervención , en 2008, refiriéndose a la relación con los trabajadores, siempre ha sido una pose de cara a la prensa o para conformar a sus amigos los políticos. Puro cinismo.

    En el muy cívico concierto extraordinario, y gracias a sus trabajadores y trabajadoras, estarán todos los periodistas y políticos. ¡Que nervios ! ¿No, Sr. Director?A ver quien le desea mucha mierda, pues tiene un papelón de órdago. Debería tener presente la carta que se le registro, el pasado 5 de marzo, de más de 300 trabajadores demandándole su renuncia al cargo.
    ¿Que respeto y consideración va a tenerse con los trabajadores del Liceu que son el mayor benefactor, con un aporte de 1.496.000 €, de aquí a final de temporada?

   Llegados a este punto y porque las espurias intenciones del Sr. Marco las reconocemos por sus hechos, solo nos queda perseverar en la extinción de semejante alimaña, perjudicial para la institución y para todas las personas que hacemos y vivimos del Liceu.
  
   Que sus tentáculos como Führer de la fundación han procurado, primero evitar el concierto de los trabajadores, y posteriormente (y no pierden a día de hoy la esperanza) de apropiárselo y desnaturalizarlo, es tan cierto como que hay noche y día.
   También es cierto que a estas alturas nadie atiende a que pensara Her Director, la institución lo ha eclipsado. Sencillamente porque se ha mostrado más un lastre que un líder, porque esta cuestionado.
    ¿Necesitamos a J.F. Marco? No. Pero desde el comité de empresa se va un poquito más allá..¿Es necesaria la figura del Dir.General? No existe en todas partes, es más, en muchos lugares se prescinde. Hay otros modelos.
    Aquí habrá que coincidir con el atizador del incendio. Sí, Don Ferran Mascarell tiene razón, hay un problema de gobernanza. Pero coincidir en el diagnostico, seria ilusorio, no quiere decir que coincidamos en el remedio. La comisión Ejecutiva debe ser más estable, vinculada a un proyecto cultural y prescindir de los vaivenes electorales. Sí, pero también ha de ser transparente y democrática. Ha de contar no la representación, la presencia y la participación de la parte social de la Fundación (la representación legal y legitima de los trabajadores) 
 
   Los afectados/as y parte, de esta situación tan conflictiva que nos toca vivir en el liceo, que por otra parte, no deja de ser más de lo mismo que se vive en todo el país, debemos encararlo con la firmeza con que se deben encarar los recortes en todos los servicios públicos. La sanidad, la educción, la investigación, la cultura, la conciliación familiar...¿quien ha dicho que tienen que tener beneficios? No los deben tener. Nunca. Ese presupuesto lleva intrínseca la desnaturalización del propio hecho de gozar de un sistema de salud digno, de innovación en lo científico y cultural de mejora en la calidad de vida y convivencia, de libertad o independencia frente a la plutocracia galopante que nos injertan en el cerebro.

   En conciencia y con responsabilidad estemos presentes ante la opinión pública para mostrar y difundir el estado de las cosas. Manifestemos nuestro posicionamiento y compromiso. Hagamos lo que hagamos cuando lo estamos haciendo es por nosotros mismos.

Los grandes caminos se inician siempre con pasos pequeños.
No dejamos de andar, pues no hay otra forma de hacer camino.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Pactasteis el despido de 24 compañeros... y ahora mendigando en la ramblita. Dais pena revolucionarios del tres al cuarto

Anónimo dijo...

Interpretando que eres uno de esos 24 compañeros despedidos, sería interesante conocer tu comportamiento de "compañero" cuando estabas en el teatro y se despedían a otros trabajadores porque hubo 24 de golpe pero antes, fueron alguna docena más. No se oían gritos ni lamentos por parte de NADIE sin embargo...
Del tres al cuarto puede haber un infinito, todo es cuestión de puntos de vista pero tu tan católica pena no la necesitamos