La cosa esta que arde.....

La iniciativa de trabajadores/as del Liceu de no desaprovechar la ocasión del estreno del ballet de Monte Carlo, para rechazar la política de despidos que ha implementado la empresa, pone de manifiesto un cabreo latente que no se puede, ni se debe contener. Así ha sido; sin entretenerse, sin dilaciones y sin descalificar a nadie, se ha marcado una dirección al Comité de Empresa y por extensión a toda acción sindical, que no puede ser ajena a las movimientos generados por el trabajo y en el trabajo.

La percepción, del territorio en que nos movemos y vivimos, donde el Liceu sufre y padece la anemia administrativa del modelo corrupto que nos gobierna(democracia burguesa en el marco capitalista-financiero); donde la óptica del benéfico por definición, está claro a quien pretende esquilmar ( a los asalariados. Los que mantengan un salario, claro).

Que las políticas de castas, camarillas y clanes sirven para dividir es una evidencia. Que la resistencia a esa violenta desatada (para los desposeídos de su trabajo, los despedidos, es una flagrante agresión) pasa por no callarse y revelarse, por no caer en los engaños y mucho menos aceptar ese juego, entendiendo que los limites existen y no es admisible que los pongan unos pocos gestores. Quizás llego el momento de hacer valer los limites, nuestros limites en cuanto a la calidad de vida y dignidad como personas.

Aflorar conciencias nos hace fuertes, ilusiona, nos une. A males comunes.....soluciones compartidas. Ciertamente; quienes no son capaces de ver comunes denominadores entre la plantilla del Liceu (todos estables hasta que nos envían al SOC) no pueden ser lastre para la defensa de un modelo de institución cultural y los puestos de trabajo que representan para muchas personas.

“Por una cultura pública y de calidad” es una proclama más integral, mucho más, que la anterior movilización en 2012, que bajo el lema “ Salvemos el Liceu/ la ópera mas triste LICEU 2012-?”, a estas alturas, parecería una campaña de marketing de estos mega- cracks que venden la solvencia del Liceu, su viabilidad, desde y en los despachos de los bancos y conselleries. Vergüenza Mascarell. Verguenza por una sociedad envilecida.

Por eso; hacerse oír, expresarse, informar, opinar y difundir (salir de los caparazones) se convierte en acto revolucionario  y la sección sindical de la Confederación General del Trabajo no puede, en modo alguno, excluirse .

Texto difundido frente el liceu el 13 de febrero de 2014

EL LICEU ES CREMA
Els treballadors i treballadores del Liceu denunciem públicament les polítiques de la Conselleria de Cultura, que ens ha imposat un Dir. General, Roger Guash, que tan sols vol despatxar gent per tal de fer quadrar uns números que ens resulten ficticis dada la manca de transparència documental al realitzar un ERO d'extinció d'amagat, defugint les seves obligacions a l'hora de negociar amb la representació dels treballadors.
La política de pànic i terror, amb acomiadaments massius i sense cap criteri professional, no la podem definir més que, com a moobing col·lectiu.
La desestructuració endegada pel Dir. General, condueix a l'externalització. Entregant a interessos privats el serveis i gestions pròpies de l'activitat del Teatre.
Ni els números, ni el model de teatre s'han consensuat o negociat. No son creïbles i sempre, la plantilla, ha pagat els dèficits d'una gestió que el Patronat del Teatre i per extensió les administracions públiques han permès, admetent quatre plans de viabilitat, al llarg d'any i mig, que cada cop ens enfonsen més.
EXIGIM EL COMPLIMENT DEL CONVENI COL·LECTIU
NO ALS ACOMIADAMENTS
NO ALS EROs

TREBALLADORS I TREBALLADORES DE LA FUNDACIÓ GRAN TEATRE DEL LICEU

EL LICEO SE QUEMA
Los trabajadores del Liceu denunciamos públicamente las políticas de la Conselleria de Cultura, que  nos ha impuesto un Dir. General, Roger Guasch, que sólo quiere despedir gente para hacer cuadrar unos números que nos resultan ficticios dada la falta de transparencia documental al realizar un ERE de extinción a escondidas, evitando sus obligaciones a la hora de negociar con la representación de los  trabajadores.
La política de pánico y terror, con despidos masivos y sin ningún criterio profesional, no la podemos definir más que como moobing colectivo.
La desestructuración emprendida por el Dir. General, conduce a la externalización. Entregando a intereses privados los servicios y gestiones propias de la actividad del Teatro.
Ni los números, ni el modelo de teatro se han consensuado o negociado. No son creíbles y siempre, la plantilla, ha pagado los déficits de una gestión que el Patronato del Teatro y por extensión las administraciones públicas han permitido, admitiendo cuatro planes de viabilidad, a lo largo de año y medio, que cada vez nos hunden más .
EXIGIMOS EL CUMPLIMIENTO DEL CONVENIO COLECTIVO
NO A LOS DESPIDOS
NO A SOS EREs

TRABAJADORES Y TRABAJADORAS DE LA FUNDACIÓN GRAN TEATRO DEL LICEO