Pensando en voz alta

Mientras escucho “round midnight” interpretado en esta ocasión por Dexter Gordon, pienso por un momento que todo es posible. Que tenemos la llave de nuestras vidas y que con ella podemos abrir cualquier puerta, por mucho que algunos se emperren en cerrarlas o en poner un portero para discernir quien puede o no puede pasar. Pero, como todo en la vida, se acaba la canción y vuelvo a la realidad: Al teatro de ópera donde trabajamos un buen número de personas que poco a poco va menguando.

Asistí como algunos de mis compañeros a la charla que pretendía ser la presentación de un supuesto plan de viabilidad. No tengo el plan, pero si lo busco en la red, fácilmente encontraré el facsímil que sin duda ha usado una empresa, seguramente subcontratada, para hacer el trabajo del tomista. Luego unos datos por aquí, otros por allá que se encuentran en las auditorias públicas de la empresa y voila, ya tenemos plan. Tenemos de donde viene;de unos gestores que haciendo todo lo mejor que sabían su trabajo, tomaron decisiones equivocadas. Tenemos como se solucionará,y lo hará una plantilla de trabajadores que arruinan las arcas del teatro y que serán los que pagarán las consecuencias de esas decisiones.

El binomio es de fácil conclusión y más para quien como buen católico, piensa que uno es igual a tres y que cualquier muchacha puede ser preñada por un arcangélico palomo y ser madre quedando así intacta su virginidad.

La charla populista de Roger, cercano pero no demasiado, a los que va a sacrificar, tuvo algunas perlas. No se puede decir que se luciera pero dejo caer algunas de las sentencias ESADEicas: en la calle hace mucho frio, echaremos a la menor cantidad posible de trabajadores, es la única solución, si fuéramos una empresa al uso ya habríamos cerrado, la rebaja salarial es inevitable, quienes tomaron decisiones equivocadas lo hicieron sin duda con la mejor de las intenciones. Llegó incluso a aceptar que hasta él se puede equivocar pero en ese caso lo habrá hecho convencido de que actuaba de la mejor manera. Es igual que esas decisiones afecten y destrocen a varias familias, el mundo es así de cruel.

Le gusta el debate fácil, el cuerpo a cuerpo con quien es más débil. Ahora bien, si alguien le contrastaba con datos que el mismo había ofrecido, se enfurecía contenidamente usando el lenguaje mediático tan en boga últimamente acusando de demagogia y tergiversación de sus palabras al contrario.

Cualquiera de las personas allí presentes, se pudo dar cuenta de que su discurso hacía aguas el mínimo intento de rascar un poco el los cimientos.

Lamentable Roger. Si esto es todo lo que sabes hacer, ni la ayuda de tu Goebbels particular te sacará del embolado en el que te has metido. Solo lamento las victimas habidas y por haber de lo que se presenta como un reinado infame. Y recuerda los riesgos que conlleva el cargo de killer como nosotros recordamos los que conlleva ser personas.